Perros celosos

 Los perros pueden sentir celos. Es un hecho. Así lo han probado dos investigadoras en un estudio en el que se pidió a los participantes, todos ellos dueños de perros, que ignorasen a su cánido y en su lugar colmasen de atenciones primero a un peluche con forma de perro, después a un cubo de plástico y posteriormente se dedicasen a leer un libro. 

¿Cuáles fueron las conclusiones que extrajeron?

Pues básicametne que a nuestros queridos amigos los perros, les ofende que dediques tu tiempo a otros congéneres incluso cuando estos son de peluche.

Estos son los resultados del estudio:

• El 78% de los perros sintieron celos de los peluches caninos.
• El 42% se celaron de los cubos de plástico.
• Solo el 22% consideró al libro un competidor a abatir.

Estoy segura de que Frixuelo se encontraría entre ese excelso club de canes que sienten celos hasta de una novela de Dan Brown... 

Si estáis leyendo esto probablemente tenéis un perro celoso y estáis esperando leer alguna recomendación. 

Como dependiendo de la situación, niños, parejas, otros animales, puede resultar un tema muy complejo, mi primer tip consiste en sugeriros que no dudéis en pedir la ayuda de un especialista que analice vuestro caso particular y os defina un plan de trabajo personalizado. 

Dicho esto y recordándoos a todos los presentes que una humilde servidora no es ni veterinaria, ni etóloga, ni educadora, ni adiestradora sino una simple y llama propietaria de mascotas, os recuerdo los consejos estándar que recogen las páginas especializadas:

Los comportamientos indeseados que derivan de los celos, suelen tener como punto de partida un cambio que nuestro perro no ha asimilado de forma correcta. Este cambio puede haber sido desde seguir un nuevo horario a trasladarnos a una nueva vivienda. También puede tener su origen en la existencia de un nuevo cuidador, la llegada a casa de nuevos animales, el nacimiento de un hijo o la existencia de una nueva pareja.

Tras cualquiera de estos desencadenantes nuestro perro se puede sentir desplazado e inseguro, por lo que es importante dedicarle al animal tiempo de calidad con la intención de evitar que se sienta desatendido.

En la misma línea, es muy importante intentar prestarle tanta o más atención que disfrutaba antes de que la novedad se produjese. 

Si la reacción la provoca una persona o un animal, hay que procurar que vea al recién llegado como alguien que le procura satisfacciones. Si se trata de la aparición de un adulto o un niño grande, recomiendan involucrar a esta persona en los paseos, la alimentación o los premios de nuestro perro. 

Si por el contrario estamos hablando de un bebé u otro animal, que no puede tener una participación activa en el cuidado de nuestro perro, tenemos que crear una relación de ideas positiva. Lo habitual es premiar el comportamiento calmado de nuestro perro con premios cuando está en su presencia y evitar los castigos para que no se establezca una relación de ideas negativa entre la presencia del recién llegado y el correcitvo. 

Si el causante del malestar es otro perro, es importante fomentar que salgan juntos de paseo para generarles sentimiento de manada.

Insisto: es un tema complejo que puede desembocar en problemas de convivencia, por lo que si consideras que tu actual situación puede desembocar en un problema, no lo dudes y acude a un profesional. 

Tu familia humana y animal se lo merece y te lo agradecerá.

¿Quién es quién? Fuente: El blog de Uma

YWC

Con información de: 

¿Celos caninos? Sí, tu perro te mira mal cuando "estás con otro"

Perros celosos: síntomas, cómo prevenirlos y tratarlos

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