La semana pasada iniciaba yo ésta
nueva “saga” de publicaciones intentando recordarnos a todos, que el problema
con los animales en España, no proviene de la forma en la que estos llegan a
sus respectivos hogares sino la ausencia de concienciación de los dueños que
los introdujeron en los mismos.
Nota: fotografías de Pixabay.
Por más que nos empeñemos, las
campañas de #NoCompresAdopta no van a hacer desaparecer (ni tengo muy claro que
deban hacerlo) la adquisición de animales. Tampoco por más que algunos se obcequen,
son todos los que compran o los que venden culpables por defecto del problema
de abandono que existe en nuestro país. Las responsabilidades tendríamos más
bien que pedírselas a los que no tienen escrúpulos en adquirir o vender animales
en determinadas condiciones.
Imagen de pixabay |
Sé que muchos no queréis ni oír
hablar de ello, pero tanto los criadores como las protectoras tenemos que
trabajar conjuntamente. Es mucho más lo que nos une que lo que nos diferencia,
al fin y al cabo, los criadores no son más que amantes de los perros que se
obsesionaron con una determinada raza.
Como yo de protectoras algo sé
(tampoco mucho, no vamos a engañarnos) pero de criadores no tengo ni pajolera
idea, le he pedido ayuda a la gran Vanessa M. ( Verdandi (@Ipathia_) para
los amigos J)
que se someta a, como ella misma dice, un tercer grado, para poder explicaros
en qué consiste realmente tanto la cría como la compra responsable de animales.
YWC: - Antes de anda te pediría que
te presentases
V: Soy Vanessa M., ex criadora de gatos y perros, con experiencia en
peluquería canina y felina, en adiestramiento canino, y permanente compañera de
animales de toda clase y condición.
YWC: ¿Tienes alguna formación
específica o se requiere alguna formación para ello?
No, no hay ninguna formación específica, aunque a todos los que nos gusta este mundo o hemos pertenecido a él, acabamos aprendiendo, como autodidactas, un montón de disciplinas relacionadas en genética, etología, veterinaria… Es útil conocer a otros criadores, acudir a exposiciones, relacionarte con criadores ya profesionales que te orienten con su experiencia.
No, no hay ninguna formación específica, aunque a todos los que nos gusta este mundo o hemos pertenecido a él, acabamos aprendiendo, como autodidactas, un montón de disciplinas relacionadas en genética, etología, veterinaria… Es útil conocer a otros criadores, acudir a exposiciones, relacionarte con criadores ya profesionales que te orienten con su experiencia.
YWC: Respecto a las Acreditaciones:
¿ Tienes qué acreditarte?, ¿Dónde?, ¿Según qué criterios?, ¿Qué costes lleva aparejados?
V.: Sí, claro que tienes que acreditarte. Se debe sacar el afijo, que es el nombre que solicitamos a través de las sociedades, sean caninas o felinas, que te avala como criador (viene implícito pagar la cuota de socio). Cuesta dinero. Es requisito obligatorio sacarse también la licencia de núcleo zoológico en el ayuntamiento. Cuesta dinero. Si tienes un macho reproductor, también debe sacarse un carnet, que confirma que es nuestro, y que cumple con las garantías veterinarias exigidas por las asociaciones (en cría de gatos). También es de pago, y se añaden las pruebas veterinarias que se deben entregar para solicitar este carnet. Inscribir camadas (dar de alta), cuesta dinero…Acudir a las exposiciones para ir creando cierto renombre con tus ejemplares, cuesta dinero. En caso de destinar un local o espacio ajeno a la vivienda, deben seguir los pasos administrativos correspondientes para dar de alta la actividad. Si quieres hacerlo todo verdaderamente legal, es imprescindible darse de alta de autónomos para poder hacer facturas con IVA, tener un CIF, declarar a Hacienda. No se trata de criterios, en realidad. Un criador comprometido, honrado, y legal, debe cumplir todos los requisitos.
V.: Sí, claro que tienes que acreditarte. Se debe sacar el afijo, que es el nombre que solicitamos a través de las sociedades, sean caninas o felinas, que te avala como criador (viene implícito pagar la cuota de socio). Cuesta dinero. Es requisito obligatorio sacarse también la licencia de núcleo zoológico en el ayuntamiento. Cuesta dinero. Si tienes un macho reproductor, también debe sacarse un carnet, que confirma que es nuestro, y que cumple con las garantías veterinarias exigidas por las asociaciones (en cría de gatos). También es de pago, y se añaden las pruebas veterinarias que se deben entregar para solicitar este carnet. Inscribir camadas (dar de alta), cuesta dinero…Acudir a las exposiciones para ir creando cierto renombre con tus ejemplares, cuesta dinero. En caso de destinar un local o espacio ajeno a la vivienda, deben seguir los pasos administrativos correspondientes para dar de alta la actividad. Si quieres hacerlo todo verdaderamente legal, es imprescindible darse de alta de autónomos para poder hacer facturas con IVA, tener un CIF, declarar a Hacienda. No se trata de criterios, en realidad. Un criador comprometido, honrado, y legal, debe cumplir todos los requisitos.
YWC: Vanessa, ¿Por qué decidiste
criar animales?
V.:
Surgió un poco sin querer. Coincidieron dos hechos en el tiempo: primero
llegó la Yorkshire, de exposición, un
regalo para mi madre, a la que le
surgieron muchos admiradores, junto con
el rescate de una gata persa, Raisha, a la que sus dueños habían abandonado
tras vender el chalet. La apariencia y carácter de la Persa nos enamoró, y
empezamos a estudiar y conocer más de esa raza de gatos… y decidimos tener más.
YWC: Y ¿Durante cuánto tiempo
fuiste criadora?
V:
Alrededor de 10 años.
YWC: Esta es una pregunta que te
puede sonar un poco tonta pero realmente lo desconozco ¿En qué consiste exactamente
ser criador?
V:
En primer lugar, obviamente, que adores los animales. Sea cual sea la raza con
la que tienes esa afinidad que te lleva a querer contribuir a conservarla,
darla a conocer y que otros hogares puedan encontrar a ese ejemplar que encaja
con las necesidades de ambos: tanto la del animal como futuros propietarios. El
dinero, en un verdadero criador, nunca será un objetivo. De hecho, debido a las
normativas que establecen las asociaciones (todas ellas son similares), habrá
periodos en los que no tengas una sola camada, y eso es buena señal. Implica
que estás respetando los tiempos de descanso de las hembras, que no tienes
tantos como para no cumplir convenientemente con sus cuidados y atenciones… Es
muy frecuente encontrarse con el mensaje de “camadas no disponibles hasta X”
(que puede ser un año largo o incluso más), en criadores de confianza. Ser
criador exige que antepongas, sea cual sea la situación, el bienestar de tus
animales a todo lo demás. Es costoso, requiere tiempo y mucha dedicación.
YWC: Y cuando criabas ¿Tenías
dedicación completa? Es decir, ¿trabajabas ocho horas al día con los animales?
V.:
No. No era una actividad económica, de modo que para pagar las facturas, y mantener
y cuidar a los animales, hacíamos nuestra vida de forma totalmente normal.
Fueron gatos y perros de casa, como cualquier otro.
YWC: Para entendernos ¿Cuál es la
cara que los particulares ignoramos de la cría? Es decir, lo que no vemos
V:
Que se ha “prostituido” el término metiendo en el saco a junta-perros y gatos,
a las odiosas granjas del Este, masivas e inhumanas, y particulares sin
escrúpulos cuyo único objetivo es sacarle rédito económico a sus camadas, sin
importarles cómo salen o a qué hogares van.
YWC: Y por curiosidad, actualmente,
¿convives con algún animal?
V.
Sí, convivo con perros, gatos, una cerda vietnamita y una hurona. Todos
rescatados. ¿Por qué? Porque no concibo otra manera de vivir, si no es con
animales a mi alrededor. Respiro, duermo, como, comparto mi vida con ellos. Es
una necesidad vital, a estas alturas.
Imagen de Pixabay |
Y como decían en aquel famosísimo
programa de televisión: “Hasta aquí podemos leer”
Nos vemos la semana que viene.
¡Sed buenos!
Nota: fotografías de Pixabay.