Un grupo de voluntarios se fue de excursión con algunos de los perros del albergue de Langreo y los propios. Una oportunidad única para divertirse, socializarse y hacer algo diferente al día a día.
La comida... ¡ays, la comida! ¿no me vas a dar ni un poquito?
Y el reparto de chuches...
¿Te apuntas a la próxima?