¿Una silla? ¿Qué vislumbras al pensar en una silla? Yo pienso
en un director de cine, sentado en la típica silla de tela negra con su nombre
escrito en blanco. Una silla… Silla es la de la cocina, donde te sientas a
desayunar por las mañanas y te tomas un café en la tranquilidad del silencio
que puedes romper a veces con la tele o la radio. También la utilizas de
escalera improvisada, para alcanzar a algo que no llegas, un paquete de
galletas o una caja olvidada en lo alto de un armario. Luego está la silla de
playa, ese artilugio que a mí siempre me recuerda a mi abuela, y que según voy
ganando en años, voy pensando la razón que tenía la buena mujer. Una silla es
también el objeto en el que empezamos a descubrir el mundo. Sentados en la
silla, nos llevan de un sitio a otro desde nuestro asiento de espectador
privilegiado. Una silla también es la butaca del teatro, desde la que atiendes
expectante el desarrollo de una buena historia. Es una silla, la fiel compañera
que te acompaña horas delante del ordenador, en la que te apoyas mientras
trabajas y te desplomas cuando no puedes más. Pienso también en las sillas de
cuando iba al colegio, y aquella manía de columpiarme con la que me llevé
también más de un castañazo. ¿Qué más sillas hay? Están las típicas sillas de
plástico, las de las terrazas, donde te tomas una cervecita en verano, mientras
miras la vida pasar. Y si pienso en verano y en sillas, no puedo olvidarme de
ese gran momento de ir a ver una película o un concierto a la plaza, y llevarte
la silla de casa cuando estás en el pueblo. Sillas… Hay muchos tipos de sillas,
las clásicas, con su asiento algo duro para reclinarse. Las rococó, con el
respaldo más mullidito. Las más humildes, de madera y mimbre que me encantan.
Las de tela para ir a la playa o al monte. Las modernas, de vanguardia,
estéticas hasta la extenuación pero incómodas hasta la escoliosis. Nos pasamos
media vida sentados en sillas, pero ¿qué es lo que ha pensado Pablo Ventura
para el calendario de este año?, ¿Cómo puede ser una silla el punto neurálgico
de todas las historias?, ¿Es la misma silla?, ¿Son diferentes?
Tengo que confesar que siento una curiosidad inmensa por
poder ver de una vez las imágenes en las que se centra el calendario. Que los
avances que se han publicado hasta ahora me hacen pensar en los cebos de las
películas en los cines. Cada vez que veo una nueva imagen me viene a la cabeza
esa frase mil veces repetidas “de los creadores de Calendario Solidario 2014
llega…” ¿y qué llega? ¿una silla? ¿y quién se sienta en esa silla? ¿Un director
de cine con su claqueta? ¿un escolar en su pupitre? ¿un oficinista frente al
ordenador? ¿o llega el jubilado del anuncio de Ikea con su silla itinerante?
Como no puedo dejar de darle vueltas al concepto he buceado
en internet, y dice wikipedia, Biblia del conocimiento de nuestros días: “La silla es
un mueble cuya
finalidad es servir de asiento una persona. Suele tener cuatro patas (...)” Vale.
Se me ocurren otras “cosas” de “cuatro patas” que sirven de “asiento moral” a
las personas. Pero, ¿se referirá a esto Pablo Ventura?
En unos días se desvelará el secreto, hasta entonces, no nos
queda más que esperar y como decíamos en la infancia “¡emoción, intriga y dolor
de barriga!”
¡Se admiten apuestas! ¿Qué os viene a la cabeza cuándo
pensáis en una silla?