Pese a que nuestras ciudades están pensadas únicamente
para los humanos y por mucho que mediante distintas legislaciones intentemos
mantenerlo todo bajo el control de una única especie, la nuestra, es innegable
que pese a todo, la naturaleza avanza entre nuestras filas, se adapta y se hace
más fuerte. Las palomas, las ratas, o los insectos dan fe de ello. Anualmente
los ayuntamientos de nuestras ciudades dedican una importante partida
presupuestaria a paliar los efectos que esta “fauna” produce en el entorno
urbano, pero pocas veces nos hemos detenido a intentar entender el proceso para
contrarrestar sus efectos.
Os pongo un ejemplo, hace unos meses leí en el
periódico que en este pueblo mío en el que vivo y al que adoro, aunque como
todo en esta vida a veces deje mucho que desear, se planteó un plan de control
para la excesiva población de palomas. Este mecanismo básicamente consistía en
la caza indiscriminada de estas aves, por medio de jaulas y/o aves rapaces. La
verdad es que cuando no te has parado a pensar en esta problemática, la medida
puede parecerte bien o mal, pero no te cuestionas su funcionamiento sino más
bien su ética. Y esto es básicamente lo que me ocurrió a mí. Unos días más
tarde apareció una nueva referencia en prensa a este problema. Esta vez, la ONG
Anadel (Asociación Nacional Animales con Derechos y Libertad) alzaba la voz
contra esta medida. Sus argumentos me parecieron de peso, aunque en un
principio puedan sonar rocambolescos:
El planteamiento de ANADEL, es el uso de comederos de
pienso con propiedades anticonceptivas. El razonamiento me parece lógico: la
población de palomas es proporcional al alimento que encuentren en un
determinado lugar, así pues a mayor alimento disponible, mayor capacidad
reproductiva y densidad de población. Eliminar un número X de individuos solo
serviría de este modo para parchear el problema, puesto que en los próximos
años la población de aves se multiplicaría. A esto, habría que añadir otro problema: con las palomas y
otras aves de nuestro entorno, la eliminación de un grupo, solo sirve para
“dejar libre” ese territorio, que vuelve a ser ocupado por el siguiente grupo,
y así hasta el infinito…
Dejando al margen el
problema ético, si es que se puede, ¿no os parece que la solución planteada por
ANADEL, ayuda a atacar el problema de raíz, en lugar de parchearlo? A esta
conclusión solo puede llegarse si se conoce no solo la problemática y sus
consecuencias, como ocurre la mayor parte de las veces, sino también la raíz.
No puede atajarse una situación si no se conoce a fondo, y entonces me
pregunté, ¿qué sabemos en realidad de la fauna urbana que nos rodea? Conviven
con nosotros en una parte de nuestra realidad que no suele ser visible a
nuestros ojos, y solo saltan a los medios de comunicación cuando son un
problema para nuestros conciudadanos. La poca atención que le prestamos a los
seres que conviven en nuestro mismo entorno, y su desconocimiento nos impide
plantear soluciones realistas ante los problemas de convivencia que surgen
entre nosotros. Echo en falta campañas educativas acerca de los seres que
conviven en nuestro hábitat, pero no solo desde el punto de vista
“proteccionista”, educativo, o científico, sino también económico, higiénico e
incluso de “seguridad”. Tener una manada de jabalíes campando por el centro
urbano, no es una buena noticia para los transeúntes, aunque tampoco me
gustaría verlos abatidos como en una cacería. Creo sobre todo que es un tema de
equilibrio. Nuestros ecosistemas no son más que pequeños equilibristas
obligados a caminar en la cuerda floja en la que es necesario que todo se
mantenga en las mismas proporciones. Por eso me ha gustado la iniciativa de la
Asociación Hombre y Territorio:
http://hombreyterritorio.org/fauna-urbana.html
que plantea la observación y reconocimiento de la fauna urbana.
http://hombreyterritorio.org/fauna-urbana.html
que plantea la observación y reconocimiento de la fauna urbana.
Os dejo también los links a las
noticias sobre el control de palomas a los que he hecho referencia en este
post:
Seguiremos ahondando en este desconocido y
controvertido tema de convivencia entre especies.
¡Buena Semana!
www.amigosdelperro.org