Sara es voluntaria en Amigos del Perro, representa perfectamente a la nueva generación, comprometida, entusiasta, con buena preparación y mucha energía... pero mejor que os lo cuente ella misma:
¿Qué hago?
Una entrevista, ¿a mi? Uy, que nervios... Je,je. Comenzamos...
Para que me conozcáis un poquito más, os cuento. Soy de Gijón pero ahora mismo vivo en Madrid, alejada de todos mis perritos del albergue... Y eso me entristece. Pero siempre que pueda, esté en Asturias y tenga el coche, no dudaré en ir a pasar el día a Langreo.
Tengo 23 años y me encantan los animales, todos, sin excepción. Al igual que unas cuantas compis de AdP, (Puri, Cris o Silvia, por ejemplo... jajaja), soy una amante de los PPP (perros potencialmente preciosos). Tengo una pitbullina que es una polvorilla y también tengo una conejita llena de pelo y amor.
Conocí a Amigos del Perro buscando diferentes protectoras de Asturias con las que poder colaborar, porque ayudar es otra de mis mayores aficiones. Me gusta ayudar, mucho. De hecho, me encanta. Y lo hago siempre que puedo. Eso, unido a mi gran amor por los animales, hizo que un día, como os contaba, me pusiera a buscar como loca donde poder colaborar. Así conocí a través del Facebook y la web, la gran familia a la que ahora tengo la suerte de pertenecer, "Amigos del Perro".
Sin dudar completé la hoja de voluntariado que había en la web, pero en esos momentos, no funcionaba muy bien... Y al ver que no recibía respuesta, insistí, esta vez, mandando un e-mail al correo que aparecía en la web. ¡Bieeeeeen! ¡¡Me contestaron!! ¡Yujuuuu!
Me invitaron a un paseo que se organizaba por la playa para dar a conocer a los perritos, llegando hasta el rastro. Aunque ese día no hacía muy buen tiempo y al final el rastro se anuló, pero el paseo, a pesar de no ser muchos... ¡lo hicimos igual! Hasta bajamos a la playa a jugar con los perritos. Ahí conocí a algunos compañeros, entre ellos Silvia, Lucio, Maribel, Cris... Ese día, como todavía no era voluntaria, no pude llevar ningún perrito, pero le di mimos a todos, ¡y ellos a mi!
Y así... Me enamoré. Entonces, ¿puedo ser voluntaria? ¿Sí? ¡Geniaaaaaaal! En cuanto pude, subí a Langreo a completar el contrato, llevar la foto, todo, todo, todo. Tenía unas ganas inmensas de conocer a todos los perritos y poder pasearlos, achucharlos, peinarlos, besarlos, amarlos...
Ahí iba yo, supermegapreparada con mi "palo-SELFIE" para grabarnos en la parada del paseo y hacernos miles de fotos y vídeos. ¡Qué guapos salimos en todas! ¡Qué de besitos y lametones!
Además de todos los paseos y fotos, después siempre subía al llegar a casa todas las mejores, con los nombres de los respectivos perritos para difundirlos por internet. Otra de las funciones importantes como voluntaria, desde mi punto de vista, y más ahora con la potencia y repercusión que tienen las redes sociales por todo el mundo. Así que, después de pasear... ¡Toca difundir!
¿Qué más hago? Pues participo siempre que puedo en todos los eventos, en el rastro, en los paseos solidarios, recogida de alimentos, etc. Ayudo en los stands que ponemos para vender y recaudar para los perritos. Siempre solía coincidir con mi querida Katy, ¡formamos un equipo 10! Estuvimos en Avilés, en el Carrefour, recogiendo pienso, latas, lejía... En la Laboral, en la Feria de Muestras, en el V día de perros, en el rastro, en el concurso canino y paseo solidario del Jardín botánico, donde fui con uno de mis ahijados, Koko y donde triunfamos con nuestros trucos que aprendimos justo antes de desfilar je,je,je ¡Se lo pasó genial! Bueno, ¡Nos lo pasamos genial! Y eso que no ganamos ningún premio... ¡Con lo bien que lo hicimos!
Por otro lado... Transmito siempre a todos los que conozco, la importancia que tiene adoptar, las responsabilidades que supone, el riesgo de abandono, la necesidad de esterilizar... Y muy importante, acercar a los niños a estos sentimientos. Tengo la suerte de tener un sobrinito igual de amante de los animales que yo. Así que me lo he llevado a varios eventos, desfilamos con Sherry en la Laboral, donde irremediablemente se enamoró de él, quería llevárselo para su casa... Vaya llorera cuando hubo que llevarlo de nuevo al albergue... Participó con un dibujo muy tierno en el concurso de dibujo que organizó AdP. Y para nuestra sorpresa... ¡¡Ganó!! Así que ahí fuimos toda la familia al V día de perros donde, cómo no, llevamos a Sherry. Se hizo padrino de honor de su amado perrito. Lo que aún no sabe es que ahora Sherry se fue a vivir súper feliz a Alemania... De momento, no se lo diremos... Hasta tiene una hucha donde ahorraba para ayudar a Sherry. Un día también subí con él y mi otro sobrino más pequeño a sacar a varios perritos en el albergue. Al principio el peque los tocaba de lejos, porque a él le dan un poquito de miedo, pero enseguida se soltó... ¡¡y luego no quería marchar!! Igualito a mi.
¡Ah! Tanto escribí, que se me olvidaba... También colaboro como madrina de dos perritos. Primero, cuando comencé como voluntaria, mis ahijados eran Astur y Katniss. Pero... ¡¡Adoptaron a Astur!! Así que, me convertí en la madrina de Koko, un loquito adorable como yo. Y pasado un tiempo... Llego otra buena noticia... ¡¡Katniss adoptada!! ¡¡Guauuuuu!! Así que espero que ahora Koko tenga la misma suerte que mis otros dos ahijados...
¿Por qué lo hago?
Bueno, creo que eso está bastante claro. Solo hay que ver como me emociono al escribir y escribir y escribir mis experiencias como voluntaria.Como bien decía, lo hago por dos razones, me encantan los animales y me encanta ayudar. Así que ayudo a todos esos animales que lo necesitan.
Me lo paso genial en los paseos, en los Stands con mis compis... Es un placer formar parte de esta gran familia. Y espero seguir haciéndolo siempre que pueda, ¡y me dejen!
Cada vez que estoy con un perrito del albergue, me quitan todos los males. Son una inyección de energía y amor en mi vida. Por eso no quiero que desaparezca nunca. Sus miradas... Me enamoran. Transmiten ternura, amor, necesitan cariño... Y yo soy una loca de los mimos y los achuchones... así que, ¡¡siempre somos grandes amigos!!
Lo hago porque, por desgracia, vivimos en un mundo lleno de rabia, envidia y maldad. Un mundo donde el ser humano se está degenerando poco a poco y al que le hace falta conciencia. Y es increíble, que dentro de ese mismo mundo, existan todos estos pobres animalitos, que por una u otra razón, han sido abandonados como juguetes de trapo y a pesar de todo, siguen dispuestos a dar amor, a perdonar y a ser fiel a una raza que le ha fallado, la humana. Unos con más miedos, otros con menos, pero todos están siempre para sacarte una sonrisa, para que les mimes como otros no lo supieron hacer, para transmitirte miles de sentimientos a través de esos ojitos y que siempre, siempre, siempre, serán sentimientos SINCEROS y SIN ESPERAR NADA A CAMBIO.
¿Qué consejos darías a los nuevos voluntarios?
El primer consejo es que te tienen que gustar los animales muchísimo. Que tienes que querer ayudar de verdad. Que tienes que mantenerte activo en todas las funciones que puedas realizar. Que tienes que ser MUY responsable a la hora de sacar a todos los perros. Que ser voluntario supone dar todo lo que puedas de ti en beneficio de todos estos animales que te necesitan y que te aseguro que la recompensa que recibes a cambio, VALE ORO. Si te gusta dar amor y recibir amor, no lo dudes. Te están esperando todos con las patitas abiertas en Langreo.