Ir al contenido principal

ELIZABETTA. KIT DE SUPERVIVENCIA PAJARIL

Lo he vuelto a hacer, soy reincidente lo confieso… La ola de calor ha traído un nuevo visitante a esta casa que cada vez se parece más a un albergue animal ambulante…

Me he encontrado un nuevo pájaro. Es un pichón de tórtola turca, casi, casi un pollo volantón. Conozco las normas: no cojas un pollo a no ser que su vida realmente esté en riesgo. En el caso de Elizabetta el calor debió de hacer que cayera anticipadamente y/o que vagara despistándose de su zona de confort, porque me la encontré un lunes a las 8 de la mañana en el portal de mi oficina y no fui capaz de identificar exactamente de dónde provenía.

Hacía 27 grados ya de mañana, pero quise ser prudente y la dejé en el mismo lugar en el que me la había tropezado. Sin embargo, y aunque Elizabetta no volaba, su presencia siguió revoloteando en mi cerebro y cuando dos horas más tarde volví a bajar a la calle y la vi acurrucada en el mismo rincón, medio adormilada y cascándole el sol en la cocorota, me di cuenta de que sus posibilidades de sobrevivir se habían reducido a que yo la recogiese, así que la metí en un archivador y la subí “de incógnito” a la oficina… Llegados a este punto, espero que mi jefe no esté leyendo esto…

En fin… Como empiezo a especializarme en el rescate pajaril, me hice con un kit de emergencia. Apañé un potito de bebé en el supermercado y una jeringuilla para diabéticos en la farmacia y subí al pajarraco a mi despacho rezando para que ni se muriera ni me delatara. En esta absurda situación transcurrió el resto de la jornada, pero la pajarraca aunque reacia a mi contacto, evolucionaba tras la hidratación y la sombra favorablemente, así que cuando finalizó el día laboral, hicimos el viaje de regreso a casa en tren, al cobijo del mismo archivador.

Una vez en Avilés, completé su ajuar temporal: compré un enorme tupper cuyo fondo llené con papel de periódico. El papel de periódico no es idóneo, pero permite identificar en las heces si tienen algún tipo de parásito o enfermedad. Le puse un recipiente con agua, adquirí la pasta de cría de insectívoros en el veterinario y utilicé los productos que ya tengo en casa de otras ocasiones para su desinfección:

  • Spray exterior Novopet. Es un repelente de insectos y parásitos externos. Sus componentes son todos naturales por lo que puede rociarse al animal y su entorno sin peligro.
  • Levamisol de Tabernil: desparasita internamente. Hay que ser muy cuidadoso con la administración del producto en el agua pues una dosis excesiva puede ser muy dañina.


El Levamisol se administra un solo día, por lo que los días siguientes añadí al agua los complementos vitamínicos para contribuir en su desarrollo. También utilizo la marca Tabernil, en este caso Tabernil Total.

Tras comprobar que no parecía tener enfermedades intestinales le he llenado el suelo de la jaula de heno de conejo y palitos del parque.

Como en esta casa comenzamos a tener de todo para esta clase de emergencias, puse a su disposición alpiste de canarios y negrillo ambos de la marca Kiki. Estos días he observado con tranquilidad que come y bebe sola, pero que para su desgracia y la mía aún no vuela.

La hemos dejado aislada para que no tenga mucho contacto con humanos, aunque como todas las aves de la familia de las palomas no parece asustarse mucho de nuestra presencia.

De vez en cuando hacemos ejercicios de revoloteo para que coja musculatura y fuerza. Tenemos que darle una vuelta a su lugar y forma de liberación, (¿Colunga?, ¿Oviedo?, ¿Avilés?) ya que aunque de momento aún no está preparada, parece que lo estará de forma inminente.

Iremos viendo cómo evoluciona y ¡seguiremos informando!






P.D. Fotos de Elizabetta recién aterrizada en casa, no está muy favorecida pero no quiero que se acostumbre a estar con humanos…




Entradas populares de este blog

Los osos del parque San Francisco: Petra y Perico

La verdad es que esta entrada bien podría haberla titulado cómo hemos cambiado , pero mejor, yo os cuento quiénes eran Petra y Perico, y ya vosotros si eso sacáis vuestras propias conclusiones. Básicamente para todos los que no somos de Oviedo, y probablemente para gran parte de los ovetenses nacidos a partir de 1976, Petra y Perico, son tan solo dos nombres anacrónicos. Connotaciones diferentes tienen para los que rozan la cincuentena, que son quienes conocen a los osos a los que me estoy refiriendo. Para el resto, profanos todos, os cuento: Allá por la mitad del siglo pasado, para ser más precisos en su ecuador, en el año 1950 un cazador en Somiedo mató a una osa. Parece ser que la osa cayó en un lazo y según las crónicas de la época el bestia del cazador, remató al animal palos, que ya hay que ser bárbaro… La matase como lo hiciera, aquella osa tenía dos esbardos , una hembra, que pasó a denominarse Petra y un macho, que durante su corta vida se llamaría Perico. Ambos osezn...

9 Curiosidades sobre gaviotas que quizás desconocieras

Siempre he pensado que el mundo sería indudablemente un lugar muy triste si no existiesen los pájaros y mi breve incursión en el mundo gaviotil no ha hecho más que reafirmarme en esta afirmación. Como estoy segura, o quiero pensar, que no soy la única a la que le apasionan los pajaruelos urbanos, voy a recolectar algunas de las anécdotas que más me han llamado la atención en un primer acercamiento a la fauna avícola urbana. Pido perdón por adelantado a biólogos y ornitólogos por lo superfluo de mi conocimiento pajaril. Empiezo como no podía ser de otra forma con las gaviotas porque Mariano ha hecho que mi visión de estas poderosas y hasta cierto punto peligrosas aves marinas haya cambiado. Gaviota Patiamarilla. Fuente:  SEO     Las gaviotas: Pueden beber agua salada y expulsarla en forma de lágrimas. ¿WTF? No pueden volar si no hay viento. La calma chicha como criptonita de gaviotas, ¿quién lo hubiera pensado? Pueden caminar sobre el agua gracias a...

Muezza: el origen de la adoración gatuna en Turquía

De entre todos los animales de la Tierra el gato era el preferido del Profeta Mahoma. De hecho, cuando predicaba, era común que lo hiciera portando algún felino en sus brazos. Se cree por tanto que el gato adquirió el don de caer siempre de pie como regalo del profeta al acariciarles el lomo. En la casa del profeta vivían varios felinos, pero la preferida era una gata llamada Muezza. Un día Mahoma se vestía para asistir a la oración matinal y al ir por su túnica descubrió a Muezza dormida sobre la manga. Para no perturbar su sueño, tomó unas tijeras y cortó la manga. Al regresar de la mezquita la gata agradecida por la consideración, le hizo una reverencia a Mahoma. El Profeta ha su vez conmovido acaricio tres veces la frente del felino, dejando con el roce de sus dedos la marca de Alá en forma de letra M.   La leyenda dice que Muezza era una gata blanca con un ojo ámbar y otro azul, motivo por el cual, gracias a ella los gatos blancos con ojos disparejos son considerados en Turquí...