Ir al contenido principal

TROY RESPONDE: PERROS PERDIDOS

Los humanos se pasan la vida perdiendo las gafas, las llaves, la cartera... pero ¿cómo se puede perder un perro?

No es que lo dejen olvidado en algún sitio y luego no recuerden dónde, o eso espero. Más bien es un problema de expresión, hablan de pérdida para referirse a muchas situaciones diferentes; perder a un ser querido no es lo mismo que perder el móvil, perder el autobús no tiene nada que ver con perder al perro.

Lo que ocurre con los perros no es que nos pierdan, sino que nos escapamos o nos despistamos; a veces encontramos la forma de salir del recinto en el que se supone que estamos seguros y recogiditos y nos vamos a explorar el mundo, otras veces nos asustamos y salimos corriendo despavoridos, y otras simplemente nos vamos alejando de nuestros humanos sin darnos cuenta... y de repente estamos demasiado lejos y no sabemos cómo volver.

Ocurre con nosotros más o menos como con los niños, que no es que nos pierdan, sino que nos perdemos. Sin embargo, a la hora de hablar de perros los humanos son conscientes de la duda que flota en el aire, y por eso utilizan eufemismos en lugar de describir la situación tal cual ha ocurrido, para no tener que oír tonterías como "si escapó por algo sería", "los perros saben encontrar su casa aunque estén lejísimos", "si no vuelve a saber cómo le trataban", "tienen que estar más pendientes", "si es que no los vigilan"... 

Hay perros escapistas, exploradores irredentos, que siempre están intentando ir a ver qué hay más allá. 

Hay perros asustadizos que se sobresaltan por un petardo, una moto, etc. y salen corriendo aterrorizados sin mirar a ningún lado, y cuando se traquilizan, no tienen ni idea de dónde están ni de cómo volver a casa; eso si no los atropella un coche durante la huida, claro. En este grupo de perdidos hay muchos galgos, que además pueden recorrer en una de esas carreras distancias impresionantes, y también muchos perros pequeños con correa extensible (flexi), que con el ruido que hace al ir golpeando el asa de plástico en el suelo, les mantiene aterrorizados, convencidos de que el peligro les va pisando los talones.

Hay perros despistados que se emocionan siguiendo un rastro por el campo o jugando con otro perro, y cuando se quieren dar cuenta, sus humanos también se han despistado y ahora... ¿cómo volvemos a encontrarnos?

Hay perros atropellados, que nadie se molesta en recoger, en mirar si tienen chip, en buscar a sus humanos... y el camión de la basura se los lleva y su familia sigue durante meses intentando averiguar qué les ha pasado, dónde están, si están bien, siempre con la esperanza y siempre con la angustia, un día tras otro.

Algunas de estas situaciones se pueden evitar tomando las precauciones apropiadas (evitar los flexis, llevar doble sistema de sujeción...), otras no. Lo que sí se puede evitar es machacar a los humanos que ya están bastante desesperados por no encontrar a su peludo. Si puedes ayudar, ayuda. Si no, procura no empeorar la situación.

Y sobre todo, si ves un perro perdido, haz lo que puedas: sujétalo y comprueba si lleva placa identificativa o chip (policía municipal y veterinarios tienen lector de chip, y no te cobrarán por hacerlo); si se escapa y no puedes cogerlo, haz fotos, avisa a todo el mundo (otra vez la policía municipal), difunde en grupos de facebook de esa zona. Dedica un ratito de tu vida a ayudar a que ese perro vuelva con su familia. Piénsalo, mañana el perro perdido podría ser yo... o podría ser tu perro.














Entradas populares de este blog

Los osos del parque San Francisco: Petra y Perico

La verdad es que esta entrada bien podría haberla titulado cómo hemos cambiado , pero mejor, yo os cuento quiénes eran Petra y Perico, y ya vosotros si eso sacáis vuestras propias conclusiones. Básicamente para todos los que no somos de Oviedo, y probablemente para gran parte de los ovetenses nacidos a partir de 1976, Petra y Perico, son tan solo dos nombres anacrónicos. Connotaciones diferentes tienen para los que rozan la cincuentena, que son quienes conocen a los osos a los que me estoy refiriendo. Para el resto, profanos todos, os cuento: Allá por la mitad del siglo pasado, para ser más precisos en su ecuador, en el año 1950 un cazador en Somiedo mató a una osa. Parece ser que la osa cayó en un lazo y según las crónicas de la época el bestia del cazador, remató al animal palos, que ya hay que ser bárbaro… La matase como lo hiciera, aquella osa tenía dos esbardos , una hembra, que pasó a denominarse Petra y un macho, que durante su corta vida se llamaría Perico. Ambos osezn...

9 Curiosidades sobre gaviotas que quizás desconocieras

Siempre he pensado que el mundo sería indudablemente un lugar muy triste si no existiesen los pájaros y mi breve incursión en el mundo gaviotil no ha hecho más que reafirmarme en esta afirmación. Como estoy segura, o quiero pensar, que no soy la única a la que le apasionan los pajaruelos urbanos, voy a recolectar algunas de las anécdotas que más me han llamado la atención en un primer acercamiento a la fauna avícola urbana. Pido perdón por adelantado a biólogos y ornitólogos por lo superfluo de mi conocimiento pajaril. Empiezo como no podía ser de otra forma con las gaviotas porque Mariano ha hecho que mi visión de estas poderosas y hasta cierto punto peligrosas aves marinas haya cambiado. Gaviota Patiamarilla. Fuente:  SEO     Las gaviotas: Pueden beber agua salada y expulsarla en forma de lágrimas. ¿WTF? No pueden volar si no hay viento. La calma chicha como criptonita de gaviotas, ¿quién lo hubiera pensado? Pueden caminar sobre el agua gracias a...

Muezza: el origen de la adoración gatuna en Turquía

De entre todos los animales de la Tierra el gato era el preferido del Profeta Mahoma. De hecho, cuando predicaba, era común que lo hiciera portando algún felino en sus brazos. Se cree por tanto que el gato adquirió el don de caer siempre de pie como regalo del profeta al acariciarles el lomo. En la casa del profeta vivían varios felinos, pero la preferida era una gata llamada Muezza. Un día Mahoma se vestía para asistir a la oración matinal y al ir por su túnica descubrió a Muezza dormida sobre la manga. Para no perturbar su sueño, tomó unas tijeras y cortó la manga. Al regresar de la mezquita la gata agradecida por la consideración, le hizo una reverencia a Mahoma. El Profeta ha su vez conmovido acaricio tres veces la frente del felino, dejando con el roce de sus dedos la marca de Alá en forma de letra M.   La leyenda dice que Muezza era una gata blanca con un ojo ámbar y otro azul, motivo por el cual, gracias a ella los gatos blancos con ojos disparejos son considerados en Turquí...