Ir al contenido principal

HIPOCRESÍA Y MALTRATO

La hipocresía, por no decir la mentira descarada, va unida al maltrato; forma parte del control, de la manipulación que ejerce el maltratador sobre su víctima, y sospecho que es ese control, ese poder, lo que de verdad busca, lo que "le pone". El maltratador convence a su víctima de que es culpa suya, de que lo hace por su bien, de que lo hace por amor, de que debería avergonzarse; le aísla de los que podrían ayudarle, no vaya a ser que alguien le abra los ojos y comprenda que el único culpable es el maltratador, y que de amor, nada. Y de paso, intenta convencer también a la sociedad de que es un corazón puro, un amante y no un verdugo. Y la sociedad se deja convencer, porque parece más conveniente.

Pero vamos despertando de ese sueño hipnótico, y si ya costaba colarnos que el fuego sagrado de la Inquisición purificase alma alguna por el bien y la eterna salvación del torturado, poco a poco vamos entendiendo que otras conductas que intentan parecer correctas, disimuladas con lemas como "siempre se ha hecho así", "es tradición", "es por su bien", no son más que prácticas inquisitoriales reducidas a la escala que cada torturador alcanza.

"Quien bien te quiere te hará llorar", sí, pero te hará llorar diciéndote la verdad, poniéndote delante la realidad: llamamos maltrato a lo que es tortura pura y dura, y maltratadores a los sádicos que viven infiltrados entre nosotros.

El maltratador ejerce violencia física y psíquica contra las mujeres, los niños, los animales... los indefensos que tenga a mano y con los que se atreva. Poco a poco se va atreviendo a más, claro. Podemos llamarles maltratadores, sociópatas, psicópatas, lo que más nos guste o lo que esté de moda. Son torturadores.

Y quien mejor lo explica, con muchísimas menos palabras que yo, es Paco Catalán. Gracias, Paco, una vez más.

Kamparina

PACO CATALÁN


Entradas populares de este blog

Los osos del parque San Francisco: Petra y Perico

La verdad es que esta entrada bien podría haberla titulado cómo hemos cambiado , pero mejor, yo os cuento quiénes eran Petra y Perico, y ya vosotros si eso sacáis vuestras propias conclusiones. Básicamente para todos los que no somos de Oviedo, y probablemente para gran parte de los ovetenses nacidos a partir de 1976, Petra y Perico, son tan solo dos nombres anacrónicos. Connotaciones diferentes tienen para los que rozan la cincuentena, que son quienes conocen a los osos a los que me estoy refiriendo. Para el resto, profanos todos, os cuento: Allá por la mitad del siglo pasado, para ser más precisos en su ecuador, en el año 1950 un cazador en Somiedo mató a una osa. Parece ser que la osa cayó en un lazo y según las crónicas de la época el bestia del cazador, remató al animal palos, que ya hay que ser bárbaro… La matase como lo hiciera, aquella osa tenía dos esbardos , una hembra, que pasó a denominarse Petra y un macho, que durante su corta vida se llamaría Perico. Ambos osezn...

9 Curiosidades sobre gaviotas que quizás desconocieras

Siempre he pensado que el mundo sería indudablemente un lugar muy triste si no existiesen los pájaros y mi breve incursión en el mundo gaviotil no ha hecho más que reafirmarme en esta afirmación. Como estoy segura, o quiero pensar, que no soy la única a la que le apasionan los pajaruelos urbanos, voy a recolectar algunas de las anécdotas que más me han llamado la atención en un primer acercamiento a la fauna avícola urbana. Pido perdón por adelantado a biólogos y ornitólogos por lo superfluo de mi conocimiento pajaril. Empiezo como no podía ser de otra forma con las gaviotas porque Mariano ha hecho que mi visión de estas poderosas y hasta cierto punto peligrosas aves marinas haya cambiado. Gaviota Patiamarilla. Fuente:  SEO     Las gaviotas: Pueden beber agua salada y expulsarla en forma de lágrimas. ¿WTF? No pueden volar si no hay viento. La calma chicha como criptonita de gaviotas, ¿quién lo hubiera pensado? Pueden caminar sobre el agua gracias a...

Muezza: el origen de la adoración gatuna en Turquía

De entre todos los animales de la Tierra el gato era el preferido del Profeta Mahoma. De hecho, cuando predicaba, era común que lo hiciera portando algún felino en sus brazos. Se cree por tanto que el gato adquirió el don de caer siempre de pie como regalo del profeta al acariciarles el lomo. En la casa del profeta vivían varios felinos, pero la preferida era una gata llamada Muezza. Un día Mahoma se vestía para asistir a la oración matinal y al ir por su túnica descubrió a Muezza dormida sobre la manga. Para no perturbar su sueño, tomó unas tijeras y cortó la manga. Al regresar de la mezquita la gata agradecida por la consideración, le hizo una reverencia a Mahoma. El Profeta ha su vez conmovido acaricio tres veces la frente del felino, dejando con el roce de sus dedos la marca de Alá en forma de letra M.   La leyenda dice que Muezza era una gata blanca con un ojo ámbar y otro azul, motivo por el cual, gracias a ella los gatos blancos con ojos disparejos son considerados en Turquí...