Ya es prácticamente Navidad, y por todas partes se ve eso de "Todo lo que quiero para Navidad es...". Yo no quiero nada para mí, ya tengo todo lo que necesito, aunque podría encontrar hueco para algunas chuches más, eso sí, si mi humana se estirara un poco más y dejara de decir cosas como "hay que ir bajando esas lorzas". Y no, tita Lola, no se me olvida que fuiste tú quien empezó a hablar de mis lorzas... te quiero mucho, peeeeeero... :Þ
Así que, este año, todo lo que quiero para Navidad es que los humanos dejen de abandonar perros, gatos, hurones, hámsters, tortugas... animales. Y que los que ya han sido abandonados vayan encontrando buenas casas, que les ayuden a confiar de nuevo en los humanos, y cambien su vida de miseria, dolor y soledad por una nueva, con calor de hogar, comida, mimos y una familia a la que cuidar.
Es un sueño, lo sé. Pero son los sueños los que hacen que el mundo avance, y poquito a poquito vamos concienciando a los humanos, haciéndoles comprender que somos animales, no piedras. Y algún día ese sueño estará al alcance de mi pata.
¡Felices fiestas!