“¿Dónde estoy? ¿Qué hago aquí?”.
Se preguntaba Yaiza en medio de aquel bosque. Sin saber cómo ni por qué llevaba
días vagando sin rumbo desde que la dejaron en aquella carretera. Los días
fueron pasando, el hambre apretaba, perdió mucho peso, su pelo fue cayendo, los
bichos la abrasaban. El miedo no le dejaba dormir ni descansar y la tristeza la
consumía. “¿Qué he hecho tan malo? ¿Merezco esto?” Estaba desesperada,
desorientada y aterrada. No le quedaban
fuerzas, se había rendido.
Pero llegó la luz. Fue recogida
en lamentables condiciones por Amigos del Perro y llevada al albergue. Y aquí
se acaba la parte triste de la historia porque lo que siguió desde entonces es
un camino de recuperación, física y espiritual, de alegrías y progresos. En
definitiva, una nueva vida de esperanza para Yaiza.
El miedo que la consumía al
llegar, se fue a pasos agigantados. Cuando Yaiza empezó a salir de paseo con
los voluntarios aún sentía un poco de desconfianza. Pero eran tantas las ganas
de contacto y cariño que tenía nuestra
princesa, que muy pronto se abrió a todos nosotros y nos mostró la realidad.
Una realidad preciosa ya que bajo aquel saquito de huesos y piel había un ser
vivo entrañable, una perrita tierna, cálida, cariñosa, buena y con muchas ganas
de seguir adelante en su nueva vida.
Ya no queda nada de la perrita
asustada que llegó al albergue. En el presente,
no siente miedo en absoluto, lo ha cambiado por el entusiasmo que la
caracteriza. Si la vas a visitar en su jaula, ella te recibe dando saltos de
alegría, encantada de verte y poder pasar un rato contigo. Cuando salió la
primera vez del albergue, todo era nuevo para ella. Viajar en coche no le
resultaba del todo agradable, pero desde el primer viaje se comporto genial sin
moverse ni protestar. Porque Yaiza es una perrita muy educada, obediente y que
aprende muy rápido. Cuando descubrió lo que era una casa, no se atrevía a
entrar. Se quedó recostada en el rellano esperando a que saliéramos de nuevo de
aquel sitio desconocido. Era todo nuevo. Cuando su curiosidad fue lo
suficientemente grande y dio el paso a entrar, nos brindo un momento entrañable
que nunca olvidaremos: vio su propio reflejo en el espejo. Se puso muy
contenta, miraba curiosa y movía la cola de lado a lado. Yaiza es la pura
imagen de la inocencia. Pasó la noche durmiendo plácidamente junto a los dos
anfitriones peludos. En definitiva su comportamiento en casa es, al igual que
ella, excelente. Le encantan las atenciones por lo que disfrutó de un intenso
baño y sesión de peluquería, siendo muy paciente en el proceso.
Si hay algo que caracteriza a
Yaiza son sus habilidades sociales. Tiene un carácter extraordinario con otros
perros. Mucha paciencia y serenidad, es precavida e inteligente. Sabe cómo
hacer para llevarse bien con todos, incluido niños traviesos. Le encanta jugar
y corretear, es un placer observarla.
¿Y con las personas? ¡Qué puedo
decir! Los que tenemos la enorme suerte de conocerla, solo tenemos palabras
buenas para ella. Sentimos adoración. Yaiza se ha ganado nuestro corazón desde el
minuto cero. Cuando conoce a alguien nuevo, se queda expectante, se acerca con
timidez y sigilo pero enseguida pone esa carita de “Quiero que me acaricies,
¿Quieres?”, esperando recibir mimos a cambio. Y claro, ¿así quién podría
resistirse?
Físicamente, también se ha
transformado: ha cogido peso, su salud es excelente y le ha crecido una
espectacular melena rubia. Yaiza es preciosa en todos los sentidos.
Cuando empecé a escribir estas
líneas tenía claro que el objetivo, describir con palabras lo especial que es
Yaiza, era ardua tarea. Su camino ha sido duro pero lo peor ya es pasado y
Yaiza espera a esa persona que pueda darle un futuro digno, días felices,
calor, ternura y amor incondicional, puesto que eso es exactamente lo que ella
tiene para ti. Es un ángel y su historia es una historia de superación.
Nos has enseñado tantas cosas… Deseamos con
todas nuestras fuerzas que alguien especial descubra lo que nosotros ya sabemos
y mientras tanto seguiremos disfrutando de los momentos que nos regalas. El día
que te vayas al hogar que te mereces, que seguro está muy próximo, envidiaremos
la fortuna de la familia que te va a tener a su lado el resto de tus días.
Porque tenerte en sus vidas es tener suerte.
Gracias Yaiza por cruzarte en nuestro camino.
Gracias a las personas que han
hecho posible la cara amable de esta historia.
Silvia Barrial Berbén
YAIZA
Hembra de Grifón.
Edad: 2 años y 8 meses.
Tamaño mediano, 22 kg.
Está en el albergue de Serín, en
Asturias (España).
Se entrega con microchip y
pasaporte canino, vacunas, desparasitación interna y externa y esterilizada.
Contacto: 636 157 439 (de 10 a
17h) / adopciones@amigosdelperro.org